No, la ciencia no puede pronosticar un terremoto en particular. La sismologà a ?esa ciencia hà brida en la que confluyen la fà sica, la geologà a, el análisis de riesgos? ha buscado explicar cómo se desatan los movimientos en la corteza terrestre para, entre otros objetivos, saber cuándo y dónde ocurrirán esas sacudidas, pero hasta hoy no existe un método confiable para predecir temblores. Susan E. Hough presenta en esta obra los principales intentos de cientà ficos en diversas partes del mundo ?de Italia a China, de Perú a Alaska? por anticiparse a los terremotos que podrà an poner en peligro la vida de las personas. Sismóloga ella misma, la autora explora los mitos sobre la predicción de temblores ?del comportamiento atà pico de los animales a la aparición de luces misteriosas en el cielo, del cambio en los niveles del agua subterránea a la emanación de ciertos gases? y las teorà as que se han desarrollado para crear sistemas de alerta temprana para prevenir catástrofes. Con California como principal escenario, pues es un laboratorio natural para el estudio de los sismos, este libro muestra asimismo los debates respecto de la responsabilidad de los expertos para comunicar a la población los riesgos, inminentes o de largo plazo, y para incidir en las polà ticas públicas. Asà que, si bien hoy no puede predecir los sismos, la ciencia tiene mucho que decirnos para convivir con ellos.
